El Servicio de Administración Tributaria ha venido fortaleciendo año con año su presencia ante ciertos grupos de contribuyentes, en específico, aquellos que tienen autorizados por la Secretaría de Economía, Programas para la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX).

Es por ello, que tanto durante el ejercicio 2008, como en el año que acaba de concluir, se estuvieron fiscalizando una gran parte de empresas con programas de maquila, a las que se les han estado practicando visitas domiciliarias, con tres objetivos primordiales:

1) La verificación de que los equipos y mercancías que se encuentran en los domicilios fiscales de las empresas maquiladoras, se encuentren legalmente en el país.
2) La revisión de las autorizaciones como empresas de comercio exterior, así como las respectivas ampliaciones que se hayan emitido por parte de la Secretaría de Economía.
3) La revisión de las operaciones de importación y exportación de cada empresa.

En esta nota nos referiremos a la primera etapa de este tipo de revisiones, en donde los visitadores fiscales del SAT dejan citatorio para que al día siguiente esté presente un representante de la contribuyente, tiempo que es muy oportuno y recomendable, para que además de buscar y preparar la documentación necesaria para dar atención a los representantes de la autoridad, que se avise al asesor legal de la empresa o algún especialista en la materia, a fin de que se prepare la logística para atender esa primera fase de la visita domiciliaria.

La importancia de esta primera etapa de la revisión, en cuanto a la verificación de la legal estancia en el país de los equipos de trabajo y mercancías que se encuentren en el domicilio de la empresa, es fundamental puesto que la misma habrá de desarrollarse en un plazo relativamente corto, en el que se deberá hacer énfasis en la primera actuación de la autoridad, es decir, en el levantamiento del acta de inicio, que para efectos de este tipo de actos de fiscalización, constituye el acta final, por lo que deberá haber mucha acuciosidad y coordinación entre el visitado y la autoridad en los datos que se asienten en dicha actuación.


En el anterior contexto, esta firma recomienda a su empresa que una vez notificado cualquier citatorio con el fin de iniciar facultades de comprobación, se acerque a la brevedad posible con su asesor jurídico especializado en la materia, para que le oriente sobre el mecanismo adecuado y estrategia a seguir, y con ello evitar ser objeto de créditos fiscales derivados de una visita domiciliaria insatisfactoria para la empresa IMMEX.




Por: Grupo Farías, Abogados Tributarios