El ejercicio de las facultades de comprobación cada día alcanza un mejor límite de perfección por las autoridades fiscales. El intercambio de información nacional e internacional, el cruce de información, los cruces generados por la DIOT y las múltiples fuentes de información que hoy tiene acceso el fisco federal, han generado que los actos de comprobación cada día sean más exactos, programados y sobre renglones específicos.
Si bien los actos de comprobación se han reducido en su número en cuanto al grueso de contribuyentes, no menos cierto resulta que han surgido otras fuentes de fiscalización directa, como son cartas o requerimientos dirigidos sobre renglones específicos a los contribuyentes. La fiscalización concurrente entre Estados y Federación, de acuerdo a los convenios de colaboración administrativa, también se segmentaron, generando un espectro más amplio de revisión. La fiscalización internacional concurrente también se agudizó desde la firma de convenios de intercambios de información y con los programas FATCA que traerán una mayor información e identificación de los contribuyentes.
Por este motivo, nuestra firma ha preparado una serie de estrategias, recomendaciones y reglas a fin de que cualquier acto de comprobación realizado en el país o en el extranjero, por cualquier autoridad o de forma individual o concurrente, se pueda llevar a cabo con el máximo apego a derecho y sobre todo, que pueda lograr liberarse de observaciones que puedan detonar una contingencia en la empresa.